En él lleva más de 500 años asentada la familia Mujo, que nos invitará a conocer su mundo y nos guiará mientras nos sumergimos en las tradiciones locales hasta acabar sintiéndonos como un miembro más del clan. Esta no es una simple clase de cocina, sino toda una inmersión cultural en la vida cotidiana y la historia de una familia centenaria.
Nada más llegar, conoceremos los hermosos alrededores antes de introducirnos en su hogar, donde 18 personas pertenecientes a tres generaciones diferentes nos darán la bienvenida con algo de beber y con historias que nos permitirán descubrir cómo fue su vida a lo largo de las décadas. Acompañe a la familia a la huerta, un rincón idílico donde ayudará a recolectar algunos ingredientes básicos para preparar la comida, como tomates y cebollas. Luego, prepárese para ponerse manos a la obra en su acogedora cocina, donde ayudará a amasar el pan y a elaborar otros platos tradicionales mientras aprende sobre la gastronomía local y los métodos naturales de conservación.
Mientras acaba de prepararse la comida, acomódese y disfrute de una copa de un vino de la zona (o, como dicen en esa casa, de “rayos de sol atrapados en agua”). Durante la comida, la familia Mujo nos hablará más acerca de sus antepasados. Nos contará, por ejemplo, el papel que desempeñaron en la sublevación de Konavle, el cual queda reflejado en documentos históricos en los que se pone de relieve su importancia para la historia de la región. Esta visita le hará sentir una profunda conexión con la vida y el legado de la familia Mujo. Después de conocer a estas personas, tendrá la sensación de que ha entrado a formar parte de su comunidad.
